De seguro eres parte de las tantas parejas que está esperando ¡el gran día! La boda de tus sueños, el verla a ella con un radiante vestido que le queda perfecto, o mirar la reacción de él desde el altar en el momento que ella llega, en un lugar especial e increíble, con todos tus seres queridos, en la fecha que ya habían planificado.
Pero ¡oh no! El coronavirus está arruinando ese momento especial.
Tal vez esto cambie tu forma de pensar respecto a una boda en tiempos de pandemia.
Una boda es muchas cosas: una celebración, un ritual, una reunión familiar o de amigos, comida especial, lágrimas, sonrisas, risas, flores, brindis, un recuerdo, vestidos, maquillaje, aros, y muchos otros pequeños detalles.
Pero siento que eso, ¡al menos ahora!, realmente complica demasiado las cosas. Una boda simplemente es esto:
· Dos personas
· Con la bendición de Dios
· Le dicen al mundo entero
· Que de los miles de millones de personas por ahí
· Se eligieron el uno al otro, por siempre.
¡Nada más importa realmente!
Quienes hemos pasado por toda la planeación de una boda, vamos a entender el sentir de quienes lo están haciendo ahora y todavía con un reto como el coronavirus.
Creo que en momentos difíciles, lo primero que necesitamos es empatía y quiero decirte que estamos juntos en esto y tu boda será una realidad con la ayuda de Dios.
Te dejo este lindo texto, es momento de reforzar nuestra fe y pedir:
“Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces”. Jeremías 33:3